La pregunta es, ¿quién es el padre?

Ahora la pregunta es quien de todos ellos es el padre, y para que entiendan les contaré la historia desde el principio.

Gaviota es una chica alegre y divertida, aunque algo rebelde. Suele desaparecer de su casa los fines de semana sin decir a donde va.

—Ya soy mayor de edad y pago mis deudas —así detiene las continuas quejas de sus padres por su comportamiento. A ellos no les queda otra opción que hacer silencio y echarle la bendición cada vez que sale por la puerta.
El viernes al salir del trabajo condujo al bar habitual, donde sus amigos la esperan. Después de par de tragos y bailes provocativos siente la sensación de devolver. Camina al baño, pero este está ocupado. Así que sale corriendo, abre la puerta que da al callejón y se introduce en la penumbra.
El mareo y las náuseas se apoderan de ella, introduce sus dedos corazón e índice por su garganta. Su piel se eriza y su cuerpo se contorsiona, emitiendo sonidos ahogados. Por su boca sale una mezcla de su última comida con las bebidas ingeridas, un olor repugnante y un sabor amargo la hacen percibir su entorno.

Allí es cuando lo escucha. Al principio es un sonido leve, luego se percibe como un quejido. Hasta que escucha al gato dentro del contenedor. Intrigada abre la tapa, pensando que el animal quiere salir.
Nada sale, enciende la luz de su celular y busca al felino. Entre basura y alimentos en descomposición hay un recién nacido envuelto en mantas y bolsas sucias. El malestar de Gaviota desaparece, trepa con cuidado y saca al bebé de ese lugar.
Después de quitarse la chaqueta y envolver al bebé, llama al 911. Los paramédicos llevan al menor al hospital y la policía entrevista a los presentes. Luego de ver los videos y observar varios hombres que entran y salen del mismo lugar. La pregunta ahora es, ¿quién de todos ellos es su padre? 

¡Quiero saber de ti!

M.R. Dávila