¿Esto es equidad? Sentada en el banco de la plaza escuche una conversación sin querer. En el banco de atrás charlaban sin cesar dos mujeres.
Una le comentaba a la otra lo buena niña que era su hija, lo buena amiga y gran compañera. Aunque, a pesar de tantas virtudes sus compañeros eran malos con ella. Le escondían las cosas, hasta se querían prospasar con su hija.
La señora siguió con su relato, de cuando en cuando alababa lo buena niña que era su hija, y lo deplorable de sus compañeros de clase. Cuando no tuvo más que decir su compañera le comento que hacía dos meses que comenzó a trabajar en una escuela. Para ser exacto en la escuela donde estudia la hija de su amiga, que no dudaba que tuviera sentimientos hacia sus compañeras, pero su conducta no era del todo correcta. Pasaba por el lado de los chicos y tocaba partes que no eran del dominio público, escudándose de que era chica. Los abofeteaba, pero a las mujeres no se le puede tocar ni con el pétalo de una flor.
Las facciones de la primera cambiaron de súbito, pero la interlocutora no se inmutó y siguió con su relato. Disculpa, pero debemos enseñarles a nuestros hijos e hijas que sin importar nuestro sexo nos debemos el mismo respeto. No por ser niñas nos tenemos que escudar en ello. El abuso y la violencia ocurre a ambos lados de la moneda, tanto hombre como mujeres sufrimos en silencio el atropello y señalamiento de la sociedad. ¿Esto es equidad?
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